Al cierre de marzo la cartera de crédito bruta ascendió a $3.807 millones, este monto es menor en 3% al reportado en igual mes de 2020.
Por su parte, los intereses y comisiones netas sumaron $42 millones, mientras que las provisiones de cartera fueron $249 millones, con lo que la cartera neta finalizó en $3.600 millones, informó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
Al cierre de 2020 la cantidad de sucursales y ventanillas que operaban en Nicaragua ascendía a 470, 6% menos que lo reportado en 2019, baja que se reportó en el contexto de la crisis económica que derivo del brote de covid19.
El fenómeno de la baja en el número de puntos de atención del sector bancario no es nuevo en el país, pues luego que en 2017 se contabilizaran 609 sucursales y ventanillas, en 2018, año marcado por la crisis política y social, la cifra cayó a 563. En 2019 siguió a la baja al descender a 501 y en 2020 disminuyó a 470.
Luego que en Nicaragua la Asamblea aprobara un proyecto de ley que obliga a los bancos locales a que permitan a los funcionarios públicos sancionados por la OFAC a tener una cuenta, existe temor de que el país sea aislado del sistema financiero internacional.
Un comunicado de la Asamblea Nacional difundido el 3 de febrero explica que los diputados aprobaron la Iniciativa de Ley de Reforma y Adición a la Ley de Protección de los Derechos de las Personas Consumidoras y Usuarias, proyecto legislativo que garantiza una mejor y mayor protección de los derechos de los consumidores y usuarios en el acceso a los bienes y servicios como un derecho humano reconocido por el Estado nicaragüense.
Entre julio y octubre de 2020 el número de personas que en El Salvador estaban explorando por Internet opciones para acceder a un crédito hipotecario aumentó 18%, y la cantidad de consumidores costarricenses que buscaban adquirir tarjetas de crédito disminuyó 60%.
La plataforma interactiva Insights del Consumidor, de CentralAmericaData, monitorea en tiempo real los cambios de hábito de los consumidores de todos los mercados en la región y en otros países de América Latina, con información fundamental para entender su comportamiento, las nuevas tendencias y anticiparse a eventuales cambios en sus patrones de compra.
Entre mayo y junio de este año la tasa activa promedio de la banca comercial ha descendido desde 11,52% a 10,28%, caída que se explica por el alto nivel de liquidez de los bancos y la baja colocación de créditos.
La pandemia que provocó el brote de covid19 ha golpeado al sistema financiero, pues debido a las condiciones actuales del mercado las tasas activas han venido a la baja entre los meses de mayo y julio.
De enero a agosto de 2020 en República Dominicana se incrementó en $845 millones el monto de nuevos préstamos colocados por las entidades financieras, comportamiento que se atribuye al manejo de la política monetaria en el contexto de la propagación de la covid19.
Con el propósito de mantener debidamente informados a los agentes económicos y al público en general, el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) presentó un análisis sobre la evolución del conjunto de medidas monetarias y financieras que han sido adoptadas en el marco de la pandemia del covid19 y el impacto que han tenido sobre las condiciones monetarias y el comportamiento del crédito al sector privado.
Durante el primer semestre del año se reportó en el país el cierre de 24 sucursales y ventanillas bancarias, fenómeno que se explica por la menor actividad financiera a nivel local a causa de la crisis económica que deriva del brote de covid19.
En el contexto de la crisis política de 2018 y emergencia sanitaria de 2020, los bancos han cerrado cientos de puesto de atención.
A nivel regional cerca de 16 millones de personas están buscando contratar servicios financieros por Internet, de este grupo de consumidores, aproximadamente el 11% explora opciones para adquirir una tarjeta de crédito.
El sistema de información interactivo desarrollado por CentralAmericaData, monitorea en tiempo real los cambios de hábitos de los consumidores de todos los mercados de la región, con información fundamental para entender el nuevo entorno comercial que ha surgido de forma acelerada.
Debido a la crisis, la Superintendencia de Bancos emitió el 22 de junio una normativa temporal para que las entidades financieras flexibilicen las condiciones crediticias aplicadas a los deudores.
La normativa es aplicable a bancos y financieras que hayan otorgado préstamos de vehículos, personales, hipotecarios para vivienda, microcréditos, pymes, agrícolas, ganaderos, industriales, comerciales y para las tarjetas de créditos.
El coronavirus ha dejado un impacto económico en diversos países. Por esta razón, algunos gobiernos están desarrollando medidas excepcionales para mitigar sus efectos. Por ejemplo, la suspensión del pago de impuestos e hipotecas para disminuir la presión económica sobre las pequeñas empresas y los hogares.
En Estados Unidos se redujeron las tasas de interés a casi cero y se aperturó un programa de estímulo de US$700.000 millones en un intento por proteger su economía, afirma Mario Miranda, director de Finanzas en MonederoSMART.
Debido a la crisis política y económica que afecta al país desde abril de 2018, escenario que se ha combinado con la crisis del covid19, la cartera crediticia pasó de $5.172 millones en marzo de 2018 a $3.404 millones al cierre de abril de 2020.
De acuerdo a cifras de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), en los primeros cuatro meses del año también se refleja una baja en la cartera crediticia, pues pasó de $3.578 millones reportados al cierre de 2019 a $3.404 millones registrados en abril de 2020, lo que representa una variación de -5% para el cuatrimestre en cuestión.
Fitch Ratings decidió cambiar la perspectiva de los bancos de la región de estable a negativa, argumentando que la crisis sanitaria actual afectará a las entidades financieras de todos los países.
Tomando en cuenta las medidas que en los últimos 15 días han adoptado los países en materia económica, a raíz de la propagación del covid19, Fitch prevé que habrá una merma en la colocación de préstamos.
Se pronostica que el impacto de la crisis del coronavirus en el sector financiero en Centroamérica se sentirá principalmente, en los servicios relacionados con la intermediación bursátil y la asesoría en inversiones, donde se espera una caída.
A partir de ahora el Banco Central será el encargado de emitir las licencias de operación para las casas de cambio y proveedores de servicios de remesas, que en el país funcionen.
En La Gaceta, Diario Oficial No. 54 del 19 de marzo del año 2020, fueron publicadas las Resoluciones CD-BCN-LIX-1-19 y CD-BCN-LIX-2-19, mediante las cuales el Consejo Directivo del BCN autorizó el "Reglamento de los proveedores de servicios de compraventa y/o cambio de monedas" y el "Reglamento de los proveedores de servicios de pago de remesas", respectivamente, informó el Banco Central de Honduras.
Para Fitch Ratings los bancos en Nicaragua continuarán presionados por los efectos restantes de una contracción económica por segundo año consecutivo, situación que deriva de la crisis política que afecta al país.