En Panamá fue aprobado en tercer debate el proyecto de ley 131, que modifica la ley de pesca y reglamenta e incentiva la acuicultura, la pesca deportiva, industrial y artesanal.
Con esta nueva ley que el 29 de octubre recibió el aval legislativo, las autoridades dispondrán de herramientas para fiscalizar la actividad con el objetivo de asegurar la conservación, reproducción, renovación y permanencia de los recursos acuáticos, informó la Asamblea Nacional.
Se estima que al año llegan al país cerca de 153 mil visitantes a realizar pesca con fines recreativos, y que la actividad genera una cadena de negocios de unos $500 millones anuales.
Según un estudio realizado por la Federación Costarricense de Pesca (Fecop), el grueso de los ingresos que en el país se reportan por pesca deportiva y turística, deriva de la llegada de turistas interesados la actividad, quienes generan ingresos anuales por $460 millones.
Desde el 19 de abril rigen en Honduras nuevos precios para los trámites de permisos y licencias en las diferentes actividades pesqueras y de comercialización de productos del sector.
Del comunicado de la Secretaría de Agricultura y Ganadería:
11 de Mayo. Nuevas tarifas para los trámites de pago de permisos y licencias en las diferentes actividades pesqueras y de comercialización de productos pesqueros, ha establecido la Secretaría de Agricultura y Ganadería, (SAG), a través de la Dirección General de Pesca y Acuicultura, (DIGEPESCA), el que entró en vigencia a partir del 19 de abril de 2018.
En Nicaragua preparan una iniciativa de ley para facilitar las concesiones para el desarrollo de marinas, atracaderos y clubes náuticos, con el objetivo de incentivar actividades turísticas como la pesca deportiva.
El anteproyecto de ley es una iniciativa de empresarios del sector privado, quienes pretenden atraer inversiones extranjeras para desarrollar las actividades turísticas que se generan en torno a las marinas, como la pesca deportiva.
Proponen reformar la ley para regular mejor al sector pesquero, que aporta el 5% del PIB, ampliando las zonas de prohibición e implementando una moratoria a las licencias de pesca comercial.
Conscientes de la relevancia que la pesca industrial, comercial y deportiva tienen para la economía panameña, la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP) prepara un borrador de ley para modernizar la actual normativa pesquera, que data de 1959.
Del 9 al 13 de noviembre empresas del sector se reunirán en Ciudad de Panamá para tratar temas de uso sostenible de los recursos marinos e innovación en métodos de pesquería.
Reseña el Instituto de Pesquerías del Golfo y el Caribe que "...el tema central del evento será "Dos océanos, mismos asuntos costeros", reflejo del interés de la membresía del GCFI, de incorporar a sus pares del Pacífico Oriental Tropical (Costa Pacífica de América, desde el sur de Baja California en México hasta el norte de Perú) en las reuniones anuales, con la intención de optimizar experiencias y compartir lecciones aprendidas, en virtud de la similitud de los problemas, retos y oportunidades que presentan ambas costas del continente americano.
A través de una iniciativa del Instituto Guatemalteco de Turismo se fomentará el desarrollo del turismo de pesca deportiva en las costas del Pacífico.
Con la creación de la Comisión Nacional para la Protección del Pez Vela, las autoridades pretenden potenciar el crecimiento del turismo de pesca deportiva en el país, un sector que ha venido cobrando mayor protagonismo en los últimos años en Guatemala y países como Costa Rica y Panamá.
Solamente son tres las marinas turísticas en funcionamiento, mientras que varios proyectos se estancan en burocracia, la oposición de ambientalistas, y consecuentes dificultades de financiamiento.
El artículo en Elfinancierocr.com reseña varias historias de proyectos fallidos para el desarrollo de marinas que se proponían aprovechar el prestigio del país como destino de turismo de mar y playas, y de pesca deportiva.
Dos proyectos turísticos, uno de playa y otro de montaña, están comenzando a construirse en Chalatenango y Usulután.
Los proyectos, que tendrán una inversión total de $45 millones, que están siendo desarrollados por el empresario salvadoreño José Ramón Barahona en conjunto con inversionistas norteamericanos, consisten en un club de golf y pesca en Usulután y un proyecto de turismo de montaña en Chalatenango, operarían a finales de 2010 o comienzos de 2011.