En julio de 2020 la deuda pública total del país ascendió a $21.874 millones, monto que es superior en 12% al reportado en igual mes de 2019, alza que se reportó en el contexto de la crisis económica y sanitaria.
Datos del Banco Central de Reserva precisan que entre julio de 2019 y el mismo mes de 2019 la deuda pública total de El Salvador se incrementó en $2.485 millones, al pasar de $19.389 millones a $21.874 millones.
Aunque la meta para este año era colocar $100 millones en bonos de deuda, durante el primer trimestre el gobierno nicaragüense sólo adjudicó $1,1 millones, poniendo en duda el nivel de confianza de los inversionistas.
Autoridades de ambos países acordaron trabajar en la unificación de sus mercados bursátiles, comenzando con la emisión de un cupo de deuda bonificada guatemalteca dirigida a inversionistas salvadoreños.
Representantes del Ministerio de Finanzas de Guatemala y del Ministerio de Hacienda de El Salvador, informaron que antes de que finalice el presente ejercicio fiscal, que el monto de deuda bonificada guatemalteca será de aproximadamente $13 millones.
El préstamo del BID se utilizará para financiar el pago de pensiones en general y de la Fuerza Armada, subsidiar la energía eléctrica, e incrementar escalafones salariales de policías y docentes.
El crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por $200 millones, tiene un período de amortización de 20 años, un período de gracia de cinco años y medio y una tasa de interés basada en LIBOR, informó el organismo internacional.
Impulsada por los compromisos financieros del Gobierno Central y los originados por las pensiones, la deuda pública del país creció 3% al cierre de 2018, llegando a $18.975 millones.
Estadísticas del Ministerio de Hacienda detallan que entre 2017 y 2018 la deuda pública que incluye los créditos contratados por el Gobierno Central, sus empresas públicas financieras y no financieras, así como el Banco Central de Reserva, aumentó $602 millones, al pasar de $18.373 millones a $18.975 millones.
La administración Sánchez Cerén pretende emitir $800 millones en títulos de deuda para repagar obligaciones que vencen el próximo año y otros $1.407 millones para complementar el presupuesto nacional de 2019.
El Ministerio de Hacienda presentó ante la Asamblea Legislativa el Proyecto de Presupuesto del próximo año, el cual contempla entre otros aspectos, ajustes al déficit fiscal que el gobierno registrará el próximo año.
De los $100 millones en títulos de deuda que el gobierno pretendía colocar en el mercado local, recibió ofertas solo por $1 millón.
El gobierno no fue capaz de colocar la totalidad de títulos de deuda que pretendía, logrando captar el interés solamente de un banco, que compró $1 millón en títulos de deuda a un año plazo y una tasa de interés de 6,5%.
Vuelve a advertir que sin un acuerdo fiscal el país corre un alto riesgo de caer en cese de pagos y quedarse sin acceso a financiamiento internacional.
Reseña Elsalvador.com que "... Pedro Argumedo, del Departamento de Estudios Económicos y Sociales de Fusades, dijo que es importante llegar a un Acuerdo Fiscal, pues de no hacerlo las consecuencias serían 'terribles', y cada vez, el tiempo se acorta."
El gobierno se vería en la imposibilidad de hacer frente a las obligaciones del segundo semestre, pues "no hay dinero para llegar a fin de año".
Las cifras de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico (Fusades) indican que el saldo actual de la deuda en Letras del Tesoro (Letes) del gobierno ya supera los $900 millones, mientras que para hacer frente a sus obligaciones del segundo semestre del año necesita $500 millones más, que tendrían que provenir también de financiamiento.
Un presupuesto estatal mal elaborado y metas de ingresos que no se cumplen impiden controlar el crecimiento de la deuda pública total, que ya llega al 57% del PIB.
Para los principales analistas de El Salvador, el principal causante del descontrolado endeudamiento estatal es la falta de planificación y transparencia con que se elabora el presupuesto nacional. "... Se sobreestiman los ingresos, pues se prevén tasas de crecimiento económico mayores a las que en realidad se pueden lograr, y del desempeño de la economía depende la recaudación de impuestos. Por otra parte, se subestiman o no se incluyen gastos, especialmente en rubros como subsidios y devoluciones de impuestos."
Fitch Ratings mantuvo la nota BB- pero señaló que prevalecen debilidades estructurales como la baja competitividad, la criminalidad, un capital humano débil y el alto costo de la energía.
Del comunicado de prensa de Fitch Ratings:
Fitch Ratings ratificó a largo plazo la deuda de largo plazo tanto en dólares como en moneda local en 'BB-'. Fitch también ratificó las calificaciones de los bonos en moneda extranjera y local sin garantía de El Salvador a 'BB-', manteniendo la perspectiva negativa.
El Gobierno sigue gastando más de lo que recauda, en crecimiento continuo de la deuda pública, que en el 2013 superó los $14 mil millones.
El saldo de la deuda pública total de El Salvador, que contempla el endeudamiento de las entidades públicas financieras y no financieras ascendió a $14,888.2 millones, lo que representa un aumento de 2,7% respecto al año anterior.
A finales de 2013 el déficit fiscal será el 4% del PIB y la deuda pública se habrá incrementado a cerca del 58% del PIB.
El artículo en Elsalvador.com reseña que "El Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), sostiene que El Salvador necesita una política fiscal sostenible que apoye el crecimiento, fomente la equidad y se adapte a condiciones cambiantes del entorno internacional. Además requiere de reformas en ingresos, gastos y transparencia."
En los seis primeros meses de 2013 la deuda pública salvadoreña subió $296.1 millones con el riesgo país aumentando en 104 puntos básicos.
Estimaciones del Banco Central de Reserva (BCR), revelan que al comparar junio de 2013 ($14,546.9 millones) con junio de 2012, los compromisos estatales crecieron $1,279.9 millones, pues en junio del año pasado se reportaron $13,267 millones.