En diciembre de 2020 el Índice Mensual de Actividad Económica registró una variación interanual de -2,6%, baja que se explica, en parte, por el comportamiento de sectores como Hoteles y restaurantes, Energía y agua y Construcción.
En diciembre, la serie desestacionalizada del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) registró un crecimiento de 3,2% respecto al mes anterior, informó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
A pesar que en septiembre y octubre de 2020 el IMAE reportó tasas de variación interanual cercanas a cero y se evidenciaba una recuperación económica, en noviembre la producción volvió a caer considerablemente al registrarse una merma de 5%.
Según el reporte oficial del Banco Central de Nicaragua, la estrepitosa caída en la producción reportada en noviembre, se debe al impacto que ocasionaron en el país los huracanes ETA e IOTA.
El Banco Mundial mejoró a todas las economías centroamericanas las proyecciones de crecimiento económico para 2021, siendo Honduras, El Salvador y Panamá los países que tienen los pronósticos más prometedores.
En junio de 2020, cuando comenzaban a reportarse los efectos sanitarios y económicos de la pandemia que provocó el brote de covid19, el Banco Mundial pronosticó que en 2021 el Producto Interno Bruto de Nicaragua mermaría en -1,6%, pero en una publicación de enero de 2021 proyecta que la caída será de -0,9%.
A causa de la caída de la actividad económica y las restricciones impuestas para contener la propagación del covid19, empresarios de Costa Rica y Panamá pronostican que el proceso de recuperación económica no se completará en el futuro cercano.
En este escenario de crisis que generó el brote de covid19, la economía costarricense no da claras señales de recuperación, pues durante noviembre de 2020 el Índice Mensual de Actividad Económica reportó una caída interanual de 6,2%, merma similar a la reportada en octubre, cuando fue de 6,3%.
Las variaciones negativas en la actividad económica de hoteles, restaurantes, servicios de electricidad, intermediación financiera, transporte y comunicaciones, explican la reducción que se reporta en el contexto de la crisis generada por el covid19.
En el tercer trimestre de 2020, la economía nicaragüense registró una variación interanual de -2,7% y una evolución promedio anual de -2% en los datos originales, según la estimación preliminar del Producto Interno Bruto (PIB) trimestral. Con este resultado, la evolución de la actividad económica en el período enero-septiembre fue de -2,8%, informó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
Aunque las fiestas de fin de año son una amenaza para que en Centroamérica se registre una segunda ola de contagios de covid19, se prevé que no se decreten cierres totales pues en la actualidad hay opciones eficaces de control en materia de salud, y menos costosas para la economía.
Cuando en marzo de 2020 se reportaron los primeros casos de covid19 en la región, la mayoría de gobiernos decidieron paralizar gran parte de las actividades productivas y decretar cuarentenas domiciliares. Estas acciones enfocadas en contener el avance del virus provocaron una severa crisis económica en todos los países.
Según cifras del Banco Central durante septiembre de 2020 el IMAE reportó una variación interanual de 0,6%, primera alza que se registra luego de seis meses de caídas en los niveles de producción, mermas que fueron causadas por la crisis generada por el brote de covid19.
Las actividades que mostraron crecimiento fueron: pesca y acuicultura, 21,3%, industria manufacturera, 14,1%, comercio, 9,7%, pecuario, 8,1%, agricultura, 6,8%, construcción, 5,1%, entre otras.
A partir de junio las economías centroamericanas comenzaron a dar señales de incipiente recuperación y al mes de agosto Guatemala, Nicaragua y Costa Rica, registraban las menores caídas en sus niveles de actividad económica.
Desde marzo de este año la región ha enfrentado una severa crisis económica que se generó a raíz del brote de covid19.
En Nicaragua el comportamiento de la actividad productiva en los sectores de hoteles y restaurantes, servicios financiero y transporte, determinaron en gran medida la contracción interanual de 3,6% del IMAE.
En agosto, el comportamiento del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) siguió mostrando el impacto de la pandemia mundial del Covid19, que condujo a una reducción de la actividad económica que en los últimos meses presenta tasas menos negativas, informó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
De acuerdo a los pronósticos del FMI, Panamá y El Salvador son las economías que en 2020 reportarán las peores caídas en su producción, mientras que Guatemala sería el país de la región que saldrá mejor librado de esta crisis económica y sanitaria.
Por la severa crisis económica que se generó a causa del brote de covid19, las proyecciones de crecimiento económico calculadas por los organismos internacionales no son nada alentadores para Centroamérica.
Durante Julio el IMAE registró una variación interanual de -4%, caída que es menor a las reportadas en abril, mayo y junio, meses en los que por la crisis generada por el covid19, la producción reportó contracciones de 10%, 8% y 6%, en su orden.
En el séptimo mes del año la actividad de agricultura creció 9,7% (2,1% en el acumulado enero-julio), debido a mayores labores y producción en los cultivos de café, maíz, frijol, arroz, sorgo, maní, entre otros productos agrícolas, informó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
En noviembre de 2019 el Funides proyectaba que la actividad económica del país cerraría 2020 con una baja de 1%, pero en el nuevo contexto de crisis el pronóstico es que la producción podría caer entre 6,5% y 13,7%.
La mayoría de las fuentes de crecimiento de la economía nacional se han deteriorado, como el turismo en los últimos dos años, la inversión extranjera directa, las exportaciones y el crédito bancario, detalla el "Informe de Coyuntura, Agosto 2020", elaborado por la Fundación Nicaraguense para el Desarrollo Económico y Social (Funides).
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe pronostica que la economía centroamericana se contraerá 6% en 2020, debido a la crisis que ha provocado la pandemia del covid-19.
El organismo internacional publicó el 15 de julio las actualizaciones de las proyecciones de crecimiento económico para los países de América Latina y el Caribe y recalcó que anto los choques externos como domésticos han resultado más fuertes de lo previsto en abril pasado, lo que ha llevado a una revisión a la baja de las cifras.
En el contexto de la crisis sanitaria y económica, la actividad económica en el país reportó una variación interanual de -10% durante abril, baja que fue inducida por el comportamiento de los sectores de hoteles y restaurantes, e industria manufacturera.
La evolución de la actividad económica de Nicaragua, como la de toda la región centroamericana, guarda correspondencia con la reducción de la actividad económica y del comercio internacional originada por la pandemia mundial del covid19, informó el Banco Central.
De enero a marzo de este año la economía nicaragüense registró un crecimiento interanual de 1,8%, alza que estuvo potenciada por la pesca y la explotación de minas y canteras.
Luego de varias mermas en la producción se reporta un comportamiento favorable, ya que de acuerdo a las cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN), durante los cuatro trimestres de 2019 el PIB registró caídas interanuales.