Más movilidad y menores costos de operación. La interacción entre telefonía y computadoras ha madurado, y los costos de entrada se hacen accesibles.
Lo importante es que teniendo en cuenta el retorno sobre la inversión, optar por tecnología IP para las comunicaciones será una decisión cada vez más favorecida en las empresas. Ese retorno sobre la inversión se ve no solamente en costos de operación inferiores al de la telefonía conmutada, sino en aumento de la productividad.