Entre julio y octubre de 2020 el número de personas que en El Salvador estaban explorando por Internet opciones para acceder a un crédito hipotecario aumentó 18%, y la cantidad de consumidores costarricenses que buscaban adquirir tarjetas de crédito disminuyó 60%.
La plataforma interactiva Insights del Consumidor, de CentralAmericaData, monitorea en tiempo real los cambios de hábito de los consumidores de todos los mercados en la región y en otros países de América Latina, con información fundamental para entender su comportamiento, las nuevas tendencias y anticiparse a eventuales cambios en sus patrones de compra.
En los últimos meses en el entorno digital el interés por las tarjetas de crédito ha venido al alza, repunte que se explica principalmente por el comportamiento de los consumidores en Panamá, Honduras, El Salvador y Costa Rica.
A través de un sistema que monitorea en tiempo real los cambios en los intereses y preferencias de los consumidores en los países de Centroamérica, desarrollado por CentralAmericaData, es posible proyectar tendencias de demanda a corto y largo plazo, para los diferentes productos, sectores y mercados que operan en la región.
Entre mayo de 2019 y el mismo mes de este año, la cantidad de tarjetas de crédito que circulan en el mercado salvadoreño aumentó en 9,2%.
De acuerdo a cifras del Observatorio de Tarjetas de Crédito (OTC), de la Defensoría del Consumidor, a mayo de 2020 circulaban en El Salvador 876.197 tarjetas de crédito, cantidad que es superior a las 801.822 registradas en igual mes de 2019.
En los países de la región más de 8 millones de personas están buscando por Internet acceder a un crédito, de este grupo de consumidores, aproximadamente el 9% explora opciones para contratar un préstamo estudiantil.
El sistema interactivo de información desarrollado por CentralAmericaData, monitorea en tiempo real los cambios de hábitos de los consumidores de todos los mercados de la región, con información fundamental para entender el nuevo entorno comercial que ha surgido de forma acelerada.
Ante las propuestas que se discuten en la Asamblea de Costa Rica, de aprobar moratorias a empresas y personas que sean afectadas por la crisis sanitaria, la Superintendencia de Entidades Financieras advierte que algunos bancos no soportarían el cese de pagos por hasta 4 meses.
El plan de los diputados es aprobar una iniciativa que se concentre en los préstamos personales, de vivienda, vehículos y de consumo, en el que se incluirían las tarjetas de crédito.
Entre diciembre de 2017 y marzo de este año, el número de créditos activos en el país se redujo 21%, explicado principalmente por la caída en os préstamos comerciales y en tarjetas.
Datos de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), precisan que entre diciembre de 2017 y marzo de este año el número de préstamos cayó en casi 400 mil, al pasar de 1,79 millones a 1,41 millones.
Poner tope a las comisiones cobradas en Costa Rica y establecer una Ley que defina límites al mercado en Guatemala, son parte de los intentos que se están haciendo en la región para regular el uso de las tarjetas de crédito.
Una propuesta de Ley presentada el pasado mes de enero ante la Asamblea Legislativa de Costa Rica, pretende regular el porcentaje de la comisión que pagan los negocios por aceptar tarjetas de crédito o débito.
Después de que se declarara inconstitucional la Ley que pretendía regular el mercado de tarjetas de crédito en Guatemala, se presentó una nueva propuesta.
La Ley de Tarjetas de Crédito que a inicios de 2019 fue declarada inconstitucional, entró en vigencia el 8 de marzo de 2016, sin embargo, luego de que las cámaras empresariales, emisores de tarjetas y el Banco de Guatemala, interpusieran recursos legales ante la Corte de Constitucionalidad (CC), fue suspendida el 31 de marzo de ese mismo año.
Al cierre del año pasado la cartera crediticia destinada al consumo por medio de tarjetas en Guatemala sumó $1.464 millones, 12% más que el dato reportado al finalizar 2017.
Datos de la Superintendencia de Bancos (SIB) precisan que en 2018 los préstamos con tarjetas de crédito representaron el 6% de la cartera en general, la cual ascendió $23.782 millones.
Al término de mayo de este año el país reportaba poco más de 805 mil tarjetas en circulación, 2% menos que lo reportado al mismo mes de 2017.
La baja registrada al quinto mes de este año se explica por el comportamiento del número de tarjetas que circulan en el mercado del Banco Financiera Comercial Hondureña, puesto que las unidades que corresponden a esta entidad financiera bajaron de 235.008 en mayo de 2017 a 207.636 reportadas en el mismo mes de 2018.
En el 2010 la deuda de consumo promedio por hogar rondaba los $3 mil, y el año pasado, solo seis años después, la cifra superaba los $6.500.
Los datos recopilados por Nacion.com detallan que la deuda promedio de cada hogar costarricense señalada en el análisis solo toma en cuenta el financiamiento con entidades supervisadas, por lo que se estaría dejando por fuera los créditos tomados para consumo a través de otras fuentes de financiamiento no reguladas, como prestamistas y casas de empeño, entre otros.
El crecimiento interanual de 16% registrado a Julio en la cartera de crédito bancario en Nicaragua se debe principalmente al aumento en los préstamos para consumo y para actividad industrial.
Del informe del Banco Central de Nicaragua:
El Banco Central de Nicaragua (BCN) publicó el 8 de septiembre de 2017 el Informe Financiero correspondiente al mes de julio del presente año.
Al 31 de enero de 2014 el número de plásticos en circulación ascendía a 1.729.945.
Del comunicado de prensa del Ministerio de Economía y Comercio:
En los últimos 18 meses, los costarricenses juntos incrementaron el saldo de la deuda por sus tarjetas de crédito, en promedio de un 1% mensual, el equivalente a $7,2 millones más cada 30 días, según confirma el último estudio realizado por la Dirección de Investigaciones Económicas y de Mercado del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC).
La cartera de créditos otorgados por medio de tarjetas creció 18% entre noviembre de 2012 y el mismo mes de 2013.
Hasta noviembre de 2013, el saldo de tarjetas activas alcanzó un monto de $1.207 millones, mientras que en igual periodo de 2012 fueron $1.021 millones, lo que representa un aumento de 18%, según estadísticas de la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP).
La Junta Directiva del Banco Central señala que los intentos de control de precios y de restricción de la competencia impulsan a la economía informal.
El artículo en Nacion.com reseña que "El Gobierno presentó, a finales de agosto, a la Asamblea Legislativa el Proyecto de Ley de Defensa al Consumidor ante la Usura en Tarjetas de Crédito."
"... La iniciativa califica como créditos de usura los préstamos con tasas que excedan dos veces el promedio de los últimos tres meses de la tasa de interés activa promedio del Sistema Financiero Nacional, calculada por el Banco Central. Actualmente, esa tasa en colones está en un 15,88%, por lo cual el tope sería del 31,76%. A partir de ahí, el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) intervendría para regular el mercado."