Usando su poder corporativo y aprovechando el vacío de poder que aqueja al Estado, una universidad pública de Costa Rica paga sueldos de país de primer mundo, exacerbando la desigualdad entre los costarricenses y distorsionando gravemente el mercado de trabajo.
EDITORIAL
La degeneración de la democracia que está ocurriendo en muchos países latinoamericanos tiene como muestra calificada a Costa Rica, otrora ejemplo del mejor sistema para vivir en sociedad que haya alumbrado la historia.
En Guatemala ya sufren los "Pactos de Trabajo", cepa del mismo virus "Convenciones colectivas" que en Costa Rica enferma al Estado, distorsiona el mercado de trabajo y genera inequidad.
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El artículo editorial Lesividad de pactos de trabajo en el sector público, publicado hoy en Elperiodico.com.gt, podría haberse escrito hace algunos años para Costa Rica. Guatemala aún parece tener oportunidad de reaccionar ante la enfermedad, con la medicación adecuada. En Costa Rica, en cambio, la enfermedad está tan extendida que la cirugía mayor que hoy necesita no parece viable, y lo único que queda es esperar la inevitable crisis final.
Gremios y autoridades del sector acordaron una nueva escala salarial que indica un mínimo de $700 para los Grado 1 y de $1.500 para los Grado 8.
El artículo en Diaadia.com reseña que "... Luego de seis meses de negociaciones el MINSA, la CSS y CONAGREPROTSA, firmaron el acuerdo de escala salarial que mejora sustancialmente la remuneración que reciben profesionales y técnicos de la salud, al servicio del Estado.
Los empresarios deberán tener en cuenta el riesgo que suponen para el clima de negocios de Costa Rica, los desbordes de los líderes de los sindicatos estatales.
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La tradición democrática de Costa Rica palidece ante la pretensión de un sindicalista de acallar a los medios mediante amenazas a la seguridad de los periodistas.
Un artículo en Crhoy.com reseña declaraciones del sindicalista Fabio Chaves sobre el cúmulo de noticias que en medios de información costarricenses revelan privilegios inaceptables de que gozan muchos funcionarios del Estado, adquiridos a contrapelo de lo que manda el artículo 57 de la propia Constitución Política: "El salario será siempre igual para trabajo igual en idénticas condiciones de eficiencia".
El presidente del BID aconsejó a Costa Rica una reforma fiscal que aumente los impuestos argumentando que hoy la perinola indica "TODOS PONEN".
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La utilización como ejemplo del viejo juego del trompo facetado del jerarca de la institución hemisférica, debió ser completada contando toda la historia: quien lanzó esta vez la perinola fue el Estado costarricense, el mismo participante del "juego" que en la jugada anterior fue beneficiado por la perinola que cuando cayó quedó mostrando el "TOMA TODO". Luis Alberto Moreno quiso decir que la grave crisis fiscal en que se encuentra el país implica que ahora TODOS debían contribuir a su solución. Eso significa aprobar más impuestos.
El sector privado pide al gobierno buscar un consenso sobre el tema entre los sectores productivos, en el contexto de una economía que pierde dinamismo.
A diferencia del último ajuste que se hizo en diciembre 2013, este año la negociación se llevará a cabo en un contexto económico y político diferente, donde elementos como la leve desaceleración en la actividad económica y las diferencias del sector privado con la administración Varela pondrán a prueba el proceso de negociación.
Entre enero y abril de este año, la nómina del Estado aumentó en 11.161 personas, principalmente en la Caja del Seguro Social y los ministerios de Educación, Salud, y Economía y Finanzas.
El aumento de funcionarios también elevó el valor total de los salarios, que pasó en términos mensuales de $210 millones cuando eran 194.855 empleados a $227 millones al incrementarse a 206.016 trabajadores.
En Costa Rica los funcionarios públicos ganan en promedio 150% más que los trabajadores del sector privado, lo que contribuye decisivamente al crecimiento de la desigualdad y a una menor competitividad general de los recursos humanos del país.
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Un artículo en Elfinancierocr.com revela las grandes diferencias entre las formas de contratar y remunerar del sector privado con las del Estado.
"... La hiperregulación estatal ha hecho de la legalidad empresarial un privilegio al que solo se accede con poder económico o político."
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En estos países -pobres desde siempre- los burócratas estatales cuyos sueldos regulares les permiten vivir en una entelequia primer mundista, tienen como preocupación primaria vigilar que las cosas sean y se hagan como debe ser, esto es, como se hace en el primer mundo.
Los sindicalistas que lo promueven, los funcionarios que lo calculan, los gobernantes que lo decretan, no son parte de la legión de desempleados que seguramente trabajarían por menos del salario mínimo oficial.
EDITORIAL
El desempleado no tiene voz -en principio porque no paga cuota sindical- y si la tuviera no la alzaría, porque se siente carente de la dignidad necesaria para hacerlo, porque se acostumbró a adoptar una postura muy humilde en las entrevistas de trabajo. Nada empobrece más el espíritu humano que la falta de actividad remunerada de alguna manera.
Los "negociadores" del Gobierno de Costa Rica plantearon "de arranque" una propuesta de aumento de los salarios de la plantilla estatal que fue recibida con "satisfacción" por los sindicatos de funcionarios públicos.
EDITORIAL
Imagínese que usted es el responsable ante los accionistas de una gran empresa que financieramente está en muy mala posición, con gastos consistentemente por encima de los ingresos, por lo que las pérdidas aumentan continuamente y amenazan la estabilidad de la corporación.