El Servicio Nacional de Salud de Costa Rica eliminó desde el 25 de septiembre la restricción para extraer y comercializar mejillón, almeja, ostras y otros productos del mar, tanto de cultivo como silvestres.
La decisión se tomó luego de que los análisis realizados en los últimos días revelaran la disminución importante en los niveles de floraciones algales tóxicas, y menos cantidad de clorofila a nivel superficial del mar.
Apostarle a alimentos que conlleven un proceso industrial, enfocarse en mercados que no estén saturados y en las tendencias que predominan entre los consumidores, son algunas de las estrategias que podrían multiplicar los ingresos de los productores agrícolas.
Se estima que la venta de piña deshidratada alcanza un valor en el mercado internacional de 1.600% superior respecto al precio que se logra al venderla fresca.
En Centroamérica cerca de 5 millones de personas manifiestan en Internet interés por los snacks o boquitas, siendo Lay, Doritos, Cheetos y Ruffles algunas de las marcas de mayor posicionamiento en la mente de los consumidores de alto poder adquisitivo.
Un análisis de los intereses y preferencias de los consumidores en Centroamérica, elaborado por el Área de Inteligencia Comercial de CentralAmericaData, arroja resultados interesantes sobre las preferencias y gustos de las personas en alimentos y todo tipo de producto o servicio, así como cadenas de restaurantes y actividades.
Berries, cerezas y cítricos, frutas que por su contenido de vitamina C generalmente se asocian con efectos positivos sobre el sistema inmunológico, reportaron alzas en las ventas en los mercados de EE.UU. y Europa durante marzo, abril y mayo de 2020.
En este contexto de nuevos hábitos de consumo, que surgieron a nivel mundial a causa del brote de covid19, las ventas de banano (por su alto contenido de potasio y sus aportes a la salud) han sido sumamente positivas.
Durante la primera siembra de maíz del ciclo 2020-2021 el volumen de la cosecha ascendió a 15,75 millones de quintales, cifra que supera en 5% a la reportada en igual período del año agrícola 2019-2020.
Entre la primera siembra de maíz (que comienza con el invierno de mayo y termina en junio) del ciclo 2019-2020 y el mismo período de 2020-2021, la producción del grano aumentó de 15,03 a 15,75 millones de quintales, detallan los datos revelados por la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo).
En el contexto de la crisis sanitaria y económica que deriva del brote de covid19, en Guatemala el precio más alto del quintal de maíz se cotizó el 18 de marzo, posterior a esa fecha los precios se estabilizaron, pero manteniéndose más altos que el costo promedio de los últimos 5 años.
Las proyecciones del Ministerio de Agricultura y Ganadera de Guatemala (MAGA) es que el precio continuará al alza durante julio y agosto, lo cual es normal en esta época, y se debe principalmente a que no se realiza cosecha del grano en el país.
De enero a junio de este año en Panamá la producción de carne de pollo decreció 10% respecto a igual período de 2019, el volumen producido de leche evaporada aumentó 40% y de los derivados del tomate en 12%.
Cifras oficiales divulgados por la Contraloría General de Panamá detallan que entre el primer semestre de 2019 y el mismo período de este año, la producción de carne de pollo pasó de 88,6 millones a 80,2 millones de kilos, lo que equivale a una reducción de 10%.
La preocupación por la salud y por una alimentación balanceada, que va de la mano con la demanda de alimentos que sean fáciles y rápidos de preparar, es una de las oportunidades que pueden aprovecharse por los exportadores centroamericanos.
En el mercado de alimentos, destaca la variedad cultural, por la convergencia de diversas tradiciones culinarias generada por la relevancia del turismo.
Explicado por la incertidumbre que se reporta en los mercados a causa de la enfermedad del covid19, en junio de 2020 el índice de precios de los alimentos a nivel mundial registró una variación de 2% respecto al mes anterior.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), informó que debido a la incertidumbre en los mercados causada por la enfermedad por covid19, los precios de los aceites vegetales, el azúcar y los productos lácteos repuntaron hasta alcanzar su nivel máximo en varios meses tras los pronunciados descensos registrados en mayo, mientras que en los mercados de cereales y carne la mayoría de los precios sufrieron una presión a la baja.
Desde el 25 de junio comenzó a operar en un centro comercial de Heredia un restaurante de la franquicia DogZilla, que atiende a sus clientes en un establecimiento de 132 metros cuadrados.
El primer restaurante que opera la franquicia en el país y que se ubica en la Plaza Bratsi, cuenta con la capacidad de atender a 63 clientes, pero por la actual crisis sanitaria, sólo funcionará a la mitad de su aforo.
Conforme las autoridades vayan eliminando las restricciones impuestas a los restaurantes para evitar la propagación del virus covid19, se pronostica que la demanda de de servicios de alimentación fuera de casa caerá alrededor de 14%.
A través de un modelo de sensibilidad de demanda-ingreso, desarrollado por el Área de Inteligencia Comercial de CentralAmericaData, se pueden proyectar las variaciones que sufrirá la demanda de los hogares por diferentes bienes y servicios a medida de que se superen las fases más críticas de la propagación del covid19 y que se vayan levantando las medidas de restricción de movilidad en los países de la región.
El Centro Comercial Montblanc, en la ciudad guatemalteca de Quetzaltenango, es un punto de venta que a una distancia de 15 minutos caminando, acapara un mercado cautivo de 35 mil personas que en conjunto realizan gastos por $11 millones, y de ellas, el 11% manifiesta interés por la comida mexicana.
En CentralAmericaData desarrollamos una herramienta de geomarketing basada en mapas interactivos, a través de los cuales se puede identificar dónde están las personas y qué características tienen como consumidores. El mapa incorpora, para cualquier país de Centroamérica, las variables población, ingreso, gasto mensual promedio y los intereses de los consumidores. Con esta información es posible identificar potenciales clientes y definir estrategias de promoción en función de ello, o también explorar tiempos de envío a domicilio desde cualquier punto de venta.
Qué consumir, qué dejar de consumir, cuáles hábitos adoptar para mejorar la salud y a qué renglones de gasto inyectarle más recursos financieros, son algunas de las preguntas que se plantean los consumidores en Centroamérica en el contexto de la nueva normalidad.
El brote de covid19 generó una revolución en los mercados de Centroamérica y sus distintos sectores económicos.
Al quinto mes de este año el índice de precios de alimentos de la FAO cayó 7% respecto al mismo mes de 2019, explicado por la disminución en los precios de la carne, productos lácteos, aceites vegetales y el azúcar.
A causa de los efectos económicos negativos que sigue teniendo la enfermedad por coronavirus (covid19), el índice ha mostrado una tendencia a la baja por cuatro meses consecutivos, informó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Cuántas personas se interesan por este tipo de alimentos, dónde se ubican, qué edades tienen y cuál es su nivel de gasto mensual, son algunas de las preguntas que pueden responderse con el uso de herramientas especializadas de geomarketing.
En CentralAmericaData desarrollamos una herramienta de geomarketing basada en mapas interactivos, a través de los cuales se puede identificar dónde están las personas y qué características tienen como consumidores. El mapa incorpora, para cualquier país de Centroamérica, variables como población, ingreso, gasto mensual promedio y los intereses de los consumidores. Con esta información es posible identificar potenciales clientes y definir estrategias de promoción en función de ello, o también explorar tiempos de envío a domicilio desde cualquier punto de venta.