La cifra es una estimación de la Dirección de Inteligencia en Costa Rica divulgada por el Departamento de Estado de EE.UU., donde se señala el aumento de organizaciones criminales con base en el país, y la poca capacidad para combatirlas.
El lavado de dinero es una actividad delictiva que maneja montos difíciles de medir. A modo de ejemplo, el informe "Illicit Financial Flows from Developing Countries: 2004-2013" de Global Financial Integrity, señala que durante los 10 años mencionados, el flujo de dinero ilícito desde Costa Rica superó los $11 mil millones, esto es unos $1.100 millones al año.
Diagrama presentando las personas y empresas señaladas por acciones relacionadas con lavado de dinero, según la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. advirtió que no se señalará a personas o instituciones por participar en la liquidación mientras no beneficien a personas o entidades ya señaladas por OFAC.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió un comunicado referente a la decisión de las autoridades hondureñas de liquidar el Banco Continental, tras el señalamiento de la institución y de varios de sus directivos por acciones de lavado de dinero del narcotráfico:
El lavado de dinero genera un efecto económico positivo para las economías, pero también empobrece la calidad de las instituciones con efectos dramáticos sobre la calidad de la vida en sociedad.
El excelente análisis que Norma Lezcano realiza en su artículo en Estrategiaynegocios.net, sobre la inclusión de miembros de la poderosa familia Rosenthal por el Departamento del Tesoro de EE.UU.
Anuncian la devolución de depósitos hasta por $9.200 (L200,000) por persona, y luego el pago de empleados, depositantes y otros, señalando que "... se cuenta con suficientes recursos para atenderlos a todos".
La causa es el ingreso de la institución a la lista de la Oficina de Control de Activos Extranjeros de EE.UU., y la congelación de sus activos en el extranjero.
Narcotráfico y pandillas son los principales factores del asesinato intencional en los países más violentos del mundo: Honduras, Belice, El Salvador y Guatemala.
Según el reporte de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas (UNODC), al 2012 Honduras registra 90,4 homicidios por cada 100 mil habitantes.
En Belice la tasa de homicidios es de 44,7 por cada 100 mil habitantes, en El Salvador es de 41,2, en Guatemala es de 39,9.
Un estudio de la CEPAL revela que las empresas de Guatemala y El Salvador pagan los costos más altos por el crimen organizado en Latinoamérica.
De acuerdo con datos del Índice de Competitividad Global 2012-13, retomados por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en su informe sobre la seguridad en el sector logístico de la región, Guatemala cuenta con un puntaje de 1.86 en una escala del 1 al 7 sobre la influencia del crimen y la violencia en los costos de operación de las empresas, donde 1 es “en gran medida” y 7 significa “en nada”.
La empresa privada participará en el monitoreo de los resultados del plan.
Siguiendo el ejemplo de Colombia, donde el monitoreo del sector empresarial privado fue clave en la implementación de las medidas de seguridad propuestas por el gobierno, empresarios de El Salvador darán seguimiento al plan de seguridad y el impuesto a los grandes capitales.
Corrupción generalizada, debilidad institucional, disputas entre los países, y la resistencia a más impuestos, comprometen las posibilidades de éxito del plan y sus 22 proyectos.
La cumbre celebrada en Guatemala, en la que por primera vez desde el año 1856 los países centroamericanos acordaron combatir juntos, culminó con planes de acción en conjunto para la lucha contra el narcotráfico.
Desde El Salvador, el presidente de EE.UU., ofreció los fondos para financiar proyectos de seguridad en la región.
En referencia a la distribución de los fondos, el mandatario señaló que serán los países centroamericanos los que decidirán como invertir los fondos en función de las necesidades particulares de cada uno.
Laprensagrafica.com recoge declaraciones del mandatario estadounidense, Barack Obama, "Será un programa diseñado y liderado en Centroamérica por los gobiernos de la región... El énfasis es trabajar con un enfoque regional y los países centroamericanos deben ayudar a darle forma y diseñar cómo el dinero debería ser gastado."
La falta de capacidad de los estados y su desventaja frente al poder económico del narcotráfico habilitan el aumento de la violencia y la corrupción.
"Utilizando sistemáticamente la violencia y la corrupción, intimidando y extorsionando a funcionarios públicos, los grupos delictivos acaudalados y poderosos han podido debilitar los sistemas policiales y judiciales.
El sector empresarial centroamericano demandó a los gobiernos mecanismos claros para combatir la inseguridad de la región.
El presidente de la Federación de Entidades Privadas de Centroamérica, Panamá y República Dominicana (Fedepricap), Carlos Amador, señaló, "Centroamérica es amenazada por el narcotráfico, las pandillas y el crimen organizado transnacional, y para ayudar a combatir esos problemas es necesaria la unión del Istmo."
La entrada en vigencia en El Salvador de la Ley anti-maras sirve de acicate para la toma de acciones regionales para la proscripción de las pandillas.
Previendo que para evitar ser encarcelados los integrantes de las pandillas salvadoreñas conocidas como "Maras" se trasladen a los países vecinos, en especial Guatemala y Honduras, estos han activado medidas extras de seguridad fronteriza.