Proponen en Panamá que se hagan públicas todas las sanciones que se impongan a las entidades que violen la ley de prevención de blanqueo de capitales.
La propuesta de la Comisión Nacional Contra el Blanqueo de Capitales, Financiamiento del Terrorismo y de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva (CNBC), creada en 2015 en el marco de la nueva ley de prevención de lavado de dinero, pretende "...'hacer más transparente el sistema financiero, que el público sepa el trabajo que se está haciendo para prevenir el delito, que haya un castigo moral y que toda la ciudadanía sepa quiénes están incumpliendo la norma'", explicó el ministro De La Guardia.
La Superintendencia Financiera de Nueva York multó con $180 millones al taiwanés Mega International Commercial Bank señalando transacciones irregulares en sus operaciones entre Panamá y Nueva York.
El banco de origen taiwanés, con activos a nivel global por más de $100 mil millones que opera en Panamá desde 1974, habría violado normas de prevención y control de lavado de dinero al realizar determinadas transacciones "sospechosas" entre el banco en Nueva York y sus sucursales en Ciudad de Panamá y Zona Libre de Colón.
La Superintendencia de Bancos de Panamá agrega revisiones especiales en las instituciones financieras anunciando que las multas a los eventuales infractores llegarían hasta $1 millón.
Del comunicado de la Superintendencia de Bancos de Panamá:
Informamos que iniciamos desde el 18 de noviembre de 2014, un programa especial de inspecciones a los bancos, con el fin de verificar el cumplimiento del régimen establecido para prevenir que sus servicios sean utilizados en forma indebida para el delito de blanqueo de capitales, el financiamiento del terrorismo y demás delitos relacionados o de similar naturaleza u origen. Este programa es una medida adicional a las inspecciones que realiza esta Superintendencia.
Mientras los empresarios centroamericanos asumimos los costos de la burocracia antilavado de dinero, los grandes bancos reciben licencia para robar.
EDITORIAL
Estados Unidos ha perdido autoridad moral en la lucha contra el narcotráfico, y los países que sufren la guerra de las drogas, deben tenerlo en cuenta.
La multa irrisoria impuesta por el Departamento de Justicia de EE.UU.