Después de resolver 14 recursos presentados, la Corte de Constitucionalidad de Guatemala declaró inconstitucional la Ley que pretendía regular el mercado de tarjetas de crédito en el país.
La Ley de Tarjetas de Crédito entró en vigencia el 8 de marzo de 2016, sin embargo, luego de que las cámaras empresariales, emisores de tarjetas y el Banco de Guatemala, interpusieran recursos legales ante la Corte de Constitucionalidad (CC), fue suspendida provisionalmente el 31 de marzo de ese mismo año.
A mayo de 2018 el crédito otorgado por los bancos de Guatemala al sector privado sumó $25.725 millones, 4% más que lo reportado en el mismo mes de 2017.
Según cifras del Banco de Guatemala el crédito al sector privado a mayo de 2018 creció 4,1% respecto a igual mes de 2017, al subir de $24.611 millones a $25.725 millones. Este aumento quedó por debajo del aumento de 8% registrado entre mismos meses de los años 2016 y 2017.
El costo del crédito bancario se ha venido incrementando de forma gradual, principalmente en los préstamos de mediano plazo a los sectores comercial e industrial.
Mientras las tasas de interés de los préstamos para consumo a plazos de 1 a 5 años se han reducido, los créditos a sectores productivos al mismo plazo han mostrado leves incrementos desde 2011.
Los créditos para compra de vehículos crecieron al doble de ritmo que la cartera de consumo, que registró un incremento del 17% en términos interanuales a julio del 2013.
“Hubo buenos resultados en la colocación de crédito para autos, muy de la mano de nuestro Autoshow”, explicó Carlos Brina, subgerente de Scotiabank.
Este tipo de créditos fueron los que más aumentaron dentro de la categoría de crédito de consumo, que alcanzó los $4.408 millones (2,2 billones de colones). Sin embargo, dentro de dicha cartera, las tarjetas de crédito continúan teniendo la mayor participación, junto al rubro de “otros”.
La demanda por préstamos por parte del sector privado no logra repuntar, según datos a febrero.
Los créditos otorgados por la banca comercial nicaragüense en febrero registraron una disminución de $31 millones, si se consideran los préstamos cobrados y la aprobación de nuevos.
Uno de los elementos que explica parte de este problema es la cautela con que los bancos están actuando en relación al otorgamiento del crédito, según se desprende del Informe Monetario y Financiero del Banco Central de ese país.