La nueva administración Solís proyecta instaurar el Impuesto al Valor Agregado y exigir constancia de pago de impuestos para trámites en instituciones públicas y para solicitar créditos bancarios.
La reforma fiscal en preparación incluye un proyecto de ley para reformar el tributo de renta. Esto es parte de un proyecto del Ministerio de Hacienda que incluye 55 acciones específicas entre las cuales se encuentran cambios en el área de ingresos, reducción del gasto público y control del endeudamiento estatal.
Ya está listo el tercer paquete de impuestos que gravaría transferencias bancarias, casas de lujo, además de productos usados por las imprentas.
El Ministerio de Hacienda aún no ha dicho cuando enviará a la Asamblea Legislativa el plan con el que se proyecta un incremento de unos $100 millones en la recaudación. De acuerdo con el jerarca de Hacienda, Carlos Cáceres, "nosotros estamos trabajando por dejar un proyecto en el cual, para 2020 podamos regresar a los mismos niveles de endeudamiento precrisis (antes de 2008). Es un 1,7 % del PIB de sacrificio que se debe hacerse por la vía de los gastos o por los ingresos".
La fundación salvadoreña Fusades advierte que si la reforma tributaria no va acompañada de cambios para mejorar el gasto público tendrá un impacto negativo en el empleo y la inversión.
Del comunicado de prensa de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social:
La situación fiscal del país es crítica e insostenible. De 2007 a 2011 la deuda pública total pasó de 43% del PIB a 56%, el gasto creció por incrementos en subsidios generalizados y remuneraciones, mientras que la inversión se redujo. La ruta para corregir esta situación fiscal quedó plasmada en el “Acuerdo Stand-By” entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2010, el cual el país debe cumplir.
En julio la diferencia entre ingresos totales y gastos corrientes fue de $87 millones. El déficit no contempla gastos de intereses por servicio de deuda, y suma en el año $527 millones, 17.7% más que el registrado a julio del 2010.
Del comunicado de prensa de ALDESA:
Los datos a julio de los ingresos y gastos del Gobierno Central son poco alentadores y continúan mostrando la nociva existencia de un déficit primario.