Autoridades de Hacienda anunciaron que los planes para este año son gestionar ante la Asamblea Legislativa la aprobación para emitir deuda en el mercado internacional, y de recibir el visto bueno, la colocación se haría en 2021.
El año pasado los planes del Ejecutivo eran emitir eurobonos por $6.000 millones, sin embargo, la Asamblea del Legislativa aprobó la colocación de sólo $1.500 millones, argumentando que el monto propuesto al inicio, era demasiado alto.
El Banco Central anunció que para el primer semestre de 2020 espera colocar $438 millones en el mercado primario, por concepto de Bonos de Estabilización.
Del comunicado del BCCR:
San José, 27 de febrero de 2020. Coherente con los objetivos de política monetaria, el Banco Central de Costa Rica espera efectuar una colocación de Bonos de Estabilización Monetaria (BEM), en el mercado primario, por la suma de ₡250.000 millones.
El saldo de deuda externa privada al culminar el 2019 fue de US$1,816.6 millones, aumentando US$175.6 millones comparado con el reportado al finalizar 2018; resultado de una utilización neta de US$191.4 millones y una variación cambiaria favorable que redujo el saldo en US$15.8 millones.
Argumentando que la fortaleza económica se ha debilitado como resultado de las tensiones sociales y que probablemente dejará un impacto negativo duradero, la calificadora redujo de B2 a B3 la nota de riesgo crediticio para el país.
El Ministerio de Finanzas adjudicó Bonos del Tesoro por un monto equivalente a $215 millones, de los cuales $155 millones fueron en moneda local y $60 millones en moneda extranjera.
El monto adjudicado representa un 8,42% del valor total por el cual fue emitido el Certificado Representativo Global para el Ejercicio Fiscal 2020, incluyendo las colocaciones para Pequeños Inversionistas, informaron las autoridades.
Argumentando que el alto déficit fiscal mantiene su tendencia al alza, la calificadora decidió degradar de B1 a B2 la nota de emisor a largo plazo y de bonos senior no garantizados del Gobierno.
Los déficits fiscales que promedian más del 6% del PIB desde 2015 han llevado a la deuda pública/PIB más alto que sus pares con calificación 'B', precisó la calificadora.
La calificadora mantuvo en BBB la calificación de incumplimiento de emisor de largo plazo, sin embargo, decidió cambiar de estable a negativa la perspectiva de riesgo, argumentando que la carga de la deuda continuará aumentando en 2020.
La revisión de la perspectiva a negativa de Panamá refleja un marcado deterioro en el déficit fiscal y el aumento significativo de la carga de la deuda del gobierno, relacionada con la acumulación de atrasos por parte de la administración anterior y objetivos de déficit fiscal más altos bajo la Ley de Responsabilidad Fiscal modificada, informó Fitch.
Para el presente año el gobierno de Guatemala proyecta colocar un monto equivalente a $2.392 millones, que incluyen nuevas emisiones y títulos próximos a vencer que volverán a adjudicarse.
De acuerdo a información de la Dirección de Crédito Público, entidad del Ministerio de Finanzas (Minfin), durante 2020 las nuevas emisiones ascenderán a $1.845 millones y las recolecciones o roll over, títulos que vencen pero que volverán a colocarse en el mercado, serán de $547 millones.
Para asegurar el financiamiento de sus funciones a futuro, el gobierno costarricense buscará que el Banco Mundial, el BID, el BCIE y la CAF le concedan préstamos durante 2020, y además planea insistir con la aprobación de $4.500 millones en eurobonos.
Para el año que recién empieza, el gobierno de Costa Rica prevé continuar con la negociación de préstamos para apoyo presupuestario con el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Centroamericanos de Integración Económica (BCIE) y la Corporación Andina de Fomento - Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
A raíz de la deuda que la Empresa Nacional de Energía Eléctrica mantiene con los generadores, el sector empresarial teme que en el 2020 se realicen racionamientos en el suministro de la electricidad.
Para el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), urge que el gobierno hondureño cancele la deuda a los generadores de energía, la cual asciende a cerca de $568 millones. De no saldarse las obligaciones, a mitad del próximo año podrían reportarse severos racionamientos en el servicio, según pronósticos del sector productivo.
En Costa Rica se preparan iniciativas de ley para reestructurar la cartera crediticia de pequeños y medianos productores agropecuarios que hayan sido afectados por fenómenos del clima.
Una de las iniciativas contempla la compra de la cartera crediticia para readecuar las deudas de los productores afectados por fenómenos climáticos y que estén sin capacidad de pago. Los créditos que aplicarían en este caso, serían los de $35 mil o menos.
Argumentando que se espera continuidad en las políticas económicas luego del cambio de administración en enero de 2020, Standard & Poor´s mantuvo la calificación de riesgo crediticio del país en BB-.
S&P Global Ratings confirmó sus calificaciones de crédito soberano a largo plazo "BB-" en moneda extranjera a largo plazo y "BB" a largo plazo en Guatemala. La perspectiva de nuestras calificaciones a largo plazo se mantiene estable. También afirmamos nuestras calificaciones de moneda extranjera y local a corto plazo 'B' en Guatemala, informó la agencia internacional.
A agosto de 2019 el saldo de la deuda externa pública del país ascendió a $6.116 millones, monto que supera en 3% al reportado al cierre de 2018.
Entre diciembre de 2018 y agosto de 2019 la proporción de la deuda en función del Producto Interno Bruto también se incrementó, al pasar de 45,4% a 49,3%, precisa el informe más reciente de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides).
A Septiembre de 2019 la deuda externa del sector público ascendió a $7.285 millones, cifra que es menor en $93 millones a lo reportado al cierre de 2018.
Al finalizar el tercer trimestre, la deuda externa del sector público registró un saldo de US$7,285.0 millones, disminuyendo 1.3% (US$92.9 millones) con relación al de diciembre de 2018. Este comportamiento se deriva de una amortización neta de US$59.5 millones (desembolsos recibidos por US$149.5 millones inferiores a los pagos de principal de US$209.0 millones), aunado a una variación cambiaria favorable que redujo el saldo en US$33.4 millones (producto de la apreciación del dólar frente a otras monedas).