El BCIE suscribió con otros organismo centroamericanos, un memorando de entendimiento que tiene como objetivo fortalecer el desarrollo del mercado regional de deuda pública.
Por medio de un comunicado oficial se informó que el acuerdo fue suscrito por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), la Secretaría Ejecutiva del Consejo de Ministros de Hacienda o Finanzas de Centroamérica, Panamá y República Dominicana (SECOSEFIN), la Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (SECMA) y la Asociación de Bolsas de Comercio de Centroamérica (BOLCEN).
El Ministerio de Hacienda colocó títulos de deuda interna en moneda local por el equivalente a $341 millones y en moneda extranjera por $22 millones.
Una nueva rebaja en los rendimientos de los títulos de deuda interna del Gobierno, se materializó el 26 de marzo de 2021 en la mejor subasta realizada este año por el Ministerio de Hacienda en la que se asignaron títulos de deuda interna por ¢209.855 millones y $21,7 millones.
La calificadora decidió mantener en "B" la nota crediticia soberana en moneda local y extranjera de largo y corto plazo, con una perspectiva negativa indica el riesgo de una rebaja en caso de que la Asamblea no apruebe una Facilidad de Fondo Extendida u otras medidas de política.
En el escenario actual, cubrir las grandes necesidades de financiamiento del gobierno puede requerir recurrir al banco central u otro financiamiento no convencional, destaca el análisis de la calificadora de riesgo.
Argumentando que el país carece de una consolidación fiscal y su deuda no es estable, la agencia calificadora decidió mantener la nota de riesgo crediticio en "B", con perspectiva negativa.
Según Fitch, la Perspectiva Negativa refleja los riesgos a la baja para la consolidación fiscal y la estabilización de la deuda debido a la incertidumbre política en medio de una incapacidad de larga data para llegar a un consenso sobre cómo abordar los desequilibrios fiscales creados por los altos déficits fiscales, el aumento de los pagos de intereses y un calendario de amortización pronunciado.
En Costa Rica el Poder Ejecutivo presentó ante la Asamblea Legislativa el proyecto de ley, para la autorización del endeudamiento correspondiente al crédito que se gestiona con el Fondo Monetario Internacional y que asciende a $1.750 millones.
El Banco Central anunció para el 8 de Marzo realizará una subasta de bonos de estabilización monetaria en el mercado local, por un valor equivalente a $133 millones.
La subasta se efectuará mediante el servicio Subasta de Valores del Sistema Nacional de Pagos Electrónicos (Sinpe) informó el Banco Central de Costa Rica (BCCR).
Los recursos financieros que prestará el FMI al gobierno costarricense, serán utilizados para mitigar la crisis fiscal, afianzar la estabilidad monetaria y financiera e impulsar la recuperación económica en el contexto de la crisis causada por la pandemia.
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó el 1 de marzo la solicitud de Costa Rica de una facilidad de Servicio Ampliado del FMI (SAF).
Además de los $1.750 millones que el gobierno pretende obtener por medio del préstamo que gestiona con el FMI, durante los cuatro años comprendidos entre 2022 y 2025 el país prevé colocar $4.000 millones por concepto de bonos de deuda externa.
Durante el 8 y 9 de febrero el Ministerio de Hacienda logró renegociar cerca de $130 millones correspondientes a vencimientos de títulos de deuda interna de los años 2021 y 2022.
Este es el primer canje de deuda interna en colones que se realiza en 2021. En esta sesión el Ministerio de Hacienda logró renegociar bonos de deuda por ¢79.814 millones, que equivalen a cerca de $130 millones.
Durante la subasta realizada el 1 de febrero de 2021, la colocación en títulos valores de deuda interna en moneda local ascendió al equivalente de $210 millones y en dólares a $115 millones.
Mediante este mecanismo, se asignaron ¢129.667 millones ($210,5 millones) en Títulos de Propiedad Deuda Interna Tasa Fija Colones y Títulos de Propiedad Deuda Interna Real Ajustable Soberano, informó el Ministerio de Hacienda.
Ante el acuerdo alcanzado por la administración Alvarado y el FMI para que Costa Rica acceda a un préstamo por $1.750 millones, el sector empresarial pide que se reduzca el gasto público y que se informe detalladamente sobre los alcances de lo suscrito por ambas partes.
En un intento por aliviar la crisis fiscal y económica por la que atraviesa el país, el año pasado la administración Alvarado comenzó las gestiones para acceder a un préstamo por $1.750 millones que será solicitado al Fondo Monetario Internacional (FMI).
El Banco de Desarrollo de América Latina aprobó una línea de crédito de $500 millones para complementar los recursos que se están destinando para mitigar el impacto de la crisis sanitaria y promover la reactivación económica.
A causa del brote de covid19, Costa Rica ha enfrentando un escenario complejo, en el que se combina una emergencia sanitaria y una crisis económica, situación que ha provocado una caída considerable en los ingresos del Gobierno.
Después que en Costa Rica concluyera el diálogo multisectorial, las principales calificadoras de riesgo coinciden en que debido a que los acuerdos suscritos para reducir el déficit son insuficientes, el gobierno deberá ejecutar de forma oportuna sus políticas fiscales.
Aunque la situación fiscal de Costa Rica ya era precaria desde antes que comenzara la crisis sanitaria y económica que provocó el brote de covid19, el escenario comenzó a empeorar desde marzo de este año.
Por medio de una subasta competitiva de valores de deuda interna denominada en Colones, el 9 de noviembre el gobierno costarricense colocó en el mercado primario el equivalente a $106 millones con vencimiento en 2024, $81 millones al 2026 y $27 millones al 2031.
Con esta asignación Hacienda alcanzó el 80,6% del monto máximo de colocación por ¢1,8 billones, anunciado el pasado 25 de agosto, durante la presentación del plan de endeudamiento para el segundo semestre del año, informaron las autoridades.
El gobierno costarricense se enfrenta a un complejo escenario, pues al no lograr consensos para acceder a préstamos internacionales, se verá obligado a buscar fuentes de financiamiento internas, lo que presionaría al alza el tipo de cambio y las tasas de interés.
La crisis económica que atraviesa el país a causa del brote de covid19 terminó por agudizar la situación fiscal del país.