Después de la crisis política por la que atravesó el país en 2018 y la crisis sanitaria que enfrentó en 2020, los empresarios mantienen las esperanzas de que las actividades turísticas se recuperen en 2021 y en los años siguientes vuelvan a la senda del crecimiento.
Al sector turístico nicaragüense le ha llovido sobre mojado en los últimos tres años.
Debido a que la cantidad de visitantes extranjeros que llegan a Nicaragua ha disminuido considerablemente, durante 2019 los negocios del sector se mantuvieron a flote con los ingresos que generan los turistas nacionales.
De acuerdo al informe "Situación de los Micro, Pequeños y Medianos Negocios Turísticos en 2019", elaborado por la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), el 62% de los negocios encuestados afirma que al momento en que se realizó la encuesta tenía menos trabajadores que en marzo 2018, semanas antes de que estallara la crisis.
Autoridades reportan que durante 2018 llegaron al país 1,4 millones de visitantes, cifra que es menor en 28% al 1,9 millones registrados en 2017, baja que se explica por la crisis social y política que atraviesa el país desde abril del año pasado.
Con varios meses de atrasos, el Instituto Nicaragüense de Turismo publicó el informe de la situación turística del país, en el que se refleja que luego de que el sector viniera creciendo de forma sostenida, durante 2018 se desplomó debido a la crisis.
Durante el primer trimestre de 2019 los ingresos por turismo sumaron $113 millones, 56% menos que lo reportado en igual período de 2018, debido a la crisis que atraviesa el país desde hace más de un año.
De acuerdo con las cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN), entre el primer trimestre de 2018 y el mismo lapso de 2019, los ingresos por turismo disminuyeron en $143 millones, al pasar de $256 millones a $113 millones.
La crisis política que se vive desde hace más de un año ha llevado a las agencias mayoristas de viajes a eliminar al país de su portafolio de destinos turísticos debido a la inseguridad.
Claudia Aguirre, presidenta de la Asociación Nicargüense de Turismo Receptivo (Antur), explicó a Elnuevodiario.com.ni que "... 2019 está resultando un año difícil, ya que la crisis iniciada en abril del año pasado está pasando factura a las actividades actuales y la perspectiva es sombría para los próximos meses."
Debido a la crisis que afecta el país desde abril del año pasado, se estima que durante 2018 las pérdidas del sector turístico nicaragüense ascendieron a $440 millones, y desaparecieron más de 62 mil puestos de trabajo.
La llegada de turistas al país es otra de las cifras que reportó una merma considerable el año pasado, ya que entre 2017 y 2018 el número de visitantes que llegó a Nicaragua cayó 55%, al pasar de 1,7 millones a 800 mil.
Al final de 2017 e inicios de 2018 las empresas del sector en Nicaragua reportaban buen desempeño, sin embargo, la situación política del país ha generado una crisis que sigue sin superarse.
En 2017 el turismo generó a la economía nicaragüense ingresos por $840 millones, 31% más que en 2016, crecimiento que mejoró las expectativas de las empresas a inicios del año, pues en el primer trimestre de 2018 las pronósticos eran que al cierre de este año los ingresos podrían ascender a $900 millones.
La gremial del sector informó que fueron cancelados 24 vuelos chárter que estaban previstos para llegar al país procedentes de Canadá, entre diciembre y febrero de 2019.
Representantes de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur) confirmaron que con la cancelación de los vuelos, dejarán de llegar entre 2 mil y 3 mil turistas.
Al respecto la presidenta de Canatur, Lucy Valenti, explicó a Laprensa.com.ni que "...
La gremial informó que a cinco meses del estallido de la crisis social y política en Nicaragua, el país ha perdido cerca de 68 mil de los 120 mil empleos que genera el sector.
La Cámara Nacional de Turismo (Canatur) presentó un informe en el que destaca el impacto que ha tenido la crisis social y política que vive el país en el sector turístico.
Según el informe este año se dejarán de percibir $400 millones en comparación al año pasado, unos 600 mil turistas ya no llegarán al país y cerca 57% de los empleos que genera el turismo se están perdiendo.
Reducir precios para atraer a turistas locales es la principal estrategia a la que están recurriendo los empresarios turísticos nicaragüenses en zonas como Tola, San Juan del Sur y la isla de Ometepe.
En Nicaragua la fuerte merma en el flujo de turistas generada por la crisis que vive el país desde abril ha obligado a los empresarios, particularmente los pequeños y medianos, a variar sus estrategias para intentar generar ingresos y sostener las operaciones.
La gremial de empresarios nicaragüenses asegura que a partir de Septiembre Copa Airlines dejará de operar las frecuencias a Managua desde San José de Costa Rica y Ciudad de Panamá.
Según el Consejo Superior de la Empresa Privada en Nicaragua (Cosep), "... Los vuelos afectados son Managua - Panamá, San José-Managua, Managua-San José y Panamá-Managua, mientras el único que la aerolínea mantiene activo es el Managua-Guatemala, no obstante, únicamente lunes, miércoles y viernes."
Debido al clima de inseguridad que prevalece en Nicaragua y la cancelación de las reservas, dos hoteles de la ciudad de León anunciaron el cierre de sus operaciones.
"A partir del 15 de julio se ha decidido cerrar totalmente las operaciones en la ciudad de León, hasta que exista un clima más seguro para el desarrollo del turismo", informó Art Collections Hotels mediante un comunicado.
Empresarios nicaragüenses del sector turístico se proponen identificar zonas del país donde la tensión política y social sea menor, con el objetivo de atraer turistas y minimizar el impacto que está generando la crisis.
Uno de los objetivos que persigue la estrategia que proponen los empresarios del sector turístico de Nicaragua es atraer principalmente a surfers o mochileros que llegan a Costa Rica.
En mayo arribaron al país vía aérea 34.400 turistas extranjeros, casi 40% menos que en el mismo mes del año pasado.
La crisis política y social que atraviesa el país continúa causando estragos en la economía nicaragüense, siendo el turismo uno de los sectores más afectados. Según estadísticas de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), en abril, mes en que comenzó la crisis, se registró una baja interanual de 16% en el número de visitantes que ingresaron vía aérea, al caer de 60.116 a 50.450.
Turoperadores reportan la cancelación de casi el 100% de las reservas para este año, y prevén que esta situación se extenderá hasta el 2019.
La crisis en la que se encuentra sumergida el país desde el pasado 14 de abril ha dejado infinidad de consecuencias negativas para el sector turístico. Una de ellos es la expuesta por representantes de la Asociación Nicaragüense de Turismo Receptivo (Antur), ya que los operadores turísticos registran niveles de cancelación de entre 90% y 100%.