Evitar hacer descuentos de forma apresurada, administrar aumentos de precios de acuerdo a los costos y mejorar el flujo de caja, son algunas de las estrategias a las que pueden recurrir las empresas para proteger su rentabilidad en contextos de inflación y recesión.
Ariel Baños, especialista en gestión de precios y fundador de Fijaciondeprecios.com, explica cuatro estrategias para mantener la rentabilidad, cuando las empresas se enfrentan a escenarios de aumento de precios y bajo dinamismo en la actividad económica.
Ante la amenaza de una desaceleración de la economía mundial y la posibilidad de que EE.UU. entre en recesión el próximo año, empresarios de la región aseguran que para mitigar los posibles efectos adversos, es clave diversificar los destinos de las exportaciones.
Analistas del mercado aseguran que la desaceleración en la actividad económica de Estados Unidos ya es una realidad, y que sobre lo que aún no hay claridad absoluta, es la posibilidad de que la economía entre en recesión el próximo año. La reciente inversión de la curva de bonos de EE.UU., que históricamente ha sido la señal que alerta una recesión en el corto plazo, podría no significar lo mismo en esta ocasión, aseguran algunas casas de bolsa estadounidense.
Hacer proyecciones reales de ventas, segmentar precios y diseñar opciones de ahorro, son algunas de las estrategias a las que pueden recurrir las empresas para proteger su rentabilidad en contextos de inflación y recesión.
Ariel Baños, especialista en gestión de precios y fundador de Fijaciondeprecios.com, detalla las técnicas que podrían ayudar a las empresas a evitar efectos negativos en sus finanzas, cuando se enfrentan a escenarios de aumento de precios y bajo dinamismo en la actividad económica.