En la actualidad transportar mercancías vía marítima entre los países centroamericanos puede incrementar los costos del flete en al menos 60% comparado con la opción terrestre, lo que representa un obstáculo al cambio en la modalidad del trasiego de mercadería en la región.
A raíz del cierre del paso aduanero de Peñas Blancas, frontera entre Costa Rica y Nicaragua, algunos empresarios de la región tuvieron que recurrir a la vía marítima para lograr entregar sus pedidos.
La manía regulatoria con la que la burocracia alimenta su existencia quita flexibilidad a la utilización de los recursos de la economía, retrasando el desarrollo.
EDITORIAL
Para los países centroamericanos será imposible el progreso si cada actividad comercial nueva debe ser previamente autorizada por un funcionario público. En la región no se practica aquello de que se puede hacer todo lo que no está prohibido, sino que la cultura general indica que solo se puede hacer lo que el Estado autorizó a hacer.
A partir de julio un furgón de carga podría viajar por mar entre ambos puertos en una travesía de 16 horas más tiempos en puerto, con un costo base de $800.
El largamente anunciado ferry entre puertos del Pacífico de Centroamérica estaría a punto de iniciar operaciones, según comunicado conjunto de la empresa Naviera Bajos del Odiel y el Gobierno de Costa Rica.