A raíz de la aprobación del marco jurídico que en El Salvador reconoce al Bitcoin como una moneda de curso legal, se teme que la falta de transparencia en el uso de esta criptomoneda represente un riesgo de lavado de dinero.
Fitch Ratings decidió cambiar la perspectiva de los bancos de la región de estable a negativa, argumentando que la crisis sanitaria actual afectará a las entidades financieras de todos los países.
Tomando en cuenta las medidas que en los últimos 15 días han adoptado los países en materia económica, a raíz de la propagación del covid19, Fitch prevé que habrá una merma en la colocación de préstamos.
La industria nicaragüense de fondos de inversión está en una etapa naciente de desarrollo donde actualmente operan dos fondos de deuda a de corto plazo.
Del reporte de Fitch Ratings:
Fitch: Industria de Fondos de Inversion en Nicaragua en Fase Inicial de Desarrollo
Fitch Ratings - San José - (Mayo 11, 2016)
Es relevante que existan productos financieros alternativos a los tradicionales (bancarios) en el mercado nicaragüense, opina Fitch Ratings. Si bien el mercado de fondos en Nicaragua es incipiente, estos productos contribuyen a la profundización del mercado de capitales local. Además facilitan el acceso a un universo de oportunidades de inversión más amplio a inversionistas del sector detallista.
Proyectan lento crecimiento en El Salvador, muy buen desempeño en Nicaragua, estabilidad en Panamá, más competencia en Guatemala y crecimiento moderado en Costa Rica.
Del reporte de Fitch Ratings "Perspectivas 2015: Bancos de Centroamérica":
Costa Rica:
Fitch Ratings revisó la Perspectiva del sector a Estable desde Positiva, debido a que la agencia no anticipa mejoras sustanciales respecto del año anterior.
Mientras en Europa rebajan notas y en América Latina las elevan, la opinión de las agencias comienza a mirarse con otros ojos.
Hace una década las emisiones de deuda de los países europeos gozaban, en su mayoría, de elevadas y atractivas calificaciones, lo cual ayudaba a mantener altos sus precios y en bajos niveles los rendimientos.
Esta situación parece haberse revertido, y hoy son los países latinoamericanos los que las calificadoras ven con buenos ojos, mientras países como Portugal o Grecia ven caer las notas de su deuda a niveles especulativos.