Mientras aumenta el presupuesto, la administración Solís solicita préstamos al Banco Mundial para amortiguar la deuda pública, transfiriendo el peso del gasto del presente a los costarricenses del futuro.
EDITORIAL
El Ministerio de Hacienda pedirá al organismo multilateral ayuda técnica para analizar la política de endeudamiento del país y un préstamo adicional, del cual aún se desconoce el monto, para pagar parte de los intereses de la actual deuda que tiene el Estado.
Sustituir el impuesto de ventas por el IVA, aplicar el sistema de renta global y mantener las exoneraciones a las zonas francas son parte de los proyectos que prepara el gobierno.
Con los tres proyectos que planea presentar en la Asamblea Legislativa, el Poder Ejecutivo pretende elevar la recaudación fiscal total a un 2% del PIB en dos años y eliminar por completo el déficit primario, que al cierre de 2013 cerró en 2,8% del PIB.
El país paga cada vez más por los intereses de la deuda del Gobierno, que en 2013 subió hasta significar el 2,6% del PIB.
En el 2013 los intereses que se pagan por las deudas del Gobierno aumentaron 29%, llegando al 2,6% del Producto Interno Bruto (PIB). De cumplirse las expectativas del Ministerio de Hacienda, la situación financiera se podría complicar más este 2014, pues se prevé que la obligación financiera llegaría al 2,9% del PIB.
El rápido crecimiento de la deuda no es solo en el gobierno central sino también en municipios y empresas del Estado.
Hasta agosto el saldo de endeudamiento del Banco Central creció 39% en comparación con el mismo período de 2012 seguido por las municipalidades con 23%.
A estos dos se les suman los entes públicos no financieros con 20% y el Gobierno Central con 25%.
El país ya ocupa el tercer lugar en Latinoamérica en diferencia entre ingresos y gastos del Estado con relación al Producto Bruto Interno.
Para el 2012 los ingresos del Gobierno fueron de 14,4% del PIB mientras que los gastos fueron de 18,8%.
Datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), revelan que comparando con las cifras de 2007 el país muestra un gran deterioro.
Costa Rica podría tener un déficit fiscal mayor al 4,8% estimado por el Banco Central para este año, llegando a 5,1% del PIB.
De acuerdo con el Programa de Estudios Fiscales de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional de Costa Rica, esta proyección se basó en que los ingresos tributarios totales aumentarían un 8,7%, tomando en cuenta una menor recaudación de renta y del impuesto en aduanas (dada una caída en las importaciones) y, además, un incremento de los gastos totales del 11,5%.