A raíz del robo de un contenedor que transportaba productos lácteos, la cámara del sector hizo un llamado a todos los gremios vinculados al comercio internacional y local, para que refuercen sus medidas de precaución.
Mediante un comunicado la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (CANISLAC) denunció que el viernes 13 de diciembre de 2019, se dio el primer robo de un contenedor de Quesillo en la historia de Nicaragua.
Se estima que desde que comenzó la crisis en Nicaragua, las pérdidas en el comercio entre empresas nicaragüenses y de El Salvador ascienden a $12 millones.
El comercio de queso y leche es uno de los que más se ha visto afectado por la crisis socio política que atraviesa Nicaragua. Según representantes del ministerio de Economía de El Salvador, las pérdidas en el comercio bilateral no solo de queso y leche, sino también de otros bienes, ascienden a $12 millones.
Pese a los nuevos requisitos de importación impuestos por el gobierno salvadoreño, en 2017 la industria láctea nicaragüense logró mantener sus niveles de exportación al país vecino.
Los datos de Cetrex reportan que el 2017 habría cerrado con un crecimiento de apenas 3% en la exportación de productos lácteos a El Salvador, lo cual es positivo para los empresarios del sector, quienes a mediados de año anticipaban cifras menor favorables, debido a la entrada en vigencia de los controles de importación más restrictivos.
La entrada de leche desde Nicaragua y Honduras complica a los productores salvadoreños, quienes aseguran perder 40% de su producción diaria debido a la presencia del producto importado.
La Asociación de Ganaderos de El Salvador (Ages) reclama que la creciente presencia de leche importada desde los países vecinos presiona a la baja los precios, dificultando la comercialización de su producto.
La gremial estima que lograrán exportar $200 millones, después de haber cerrado 2016 con $172 millones, debido a los conflictos sanitarios que generaron el cierre temporal de mercados vecinos, como Costa Rica.
Las dificultades que enfrentó la industria lechera en Nicaragua a mediados de 2016 con el conflicto por el comercio de productos lácteos con Costa Rica, y el cierre temporal del mercado de Honduras afectaron el desempeño general del sector, cuyas exportaciones no superaron los $200 millones, como sí se había logrado en años anteriores.
Formalizar al sector y mejorar la implementación de medidas sanitarias permitiría explotar el potencial de exportación y aprovechar la creciente demanda internacional.
Reportan que existen 37 plantas procesadoras de queso certificadas por el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA), de las cuales 36 elaboran quesos para exportación. Cifras del Área de Inteligencia Comercial de CentralAmericaData.COM señalan que en 2015 Nicaragua lideró la exportación de leche y productos lácteos en la región, con $200 millones vendidos. El potencial de exportación de lácteos que tiene el país puede ser mejor aprovechado para mejorar las ventas de queso al exterior.
La merma en el abastecimiento y los altos costos de producción afectan los ingresos por ventas a nivel local y en el exterior.
Datos del Banco Central de Nicaragua (BCN) revelan que hasta setiembre anterior el acopio nacional de leche era de 72 millones de galones, es decir 2,9 millones menos que lo reportado en igual periodo de 2012.
Además los ingresos por la exportación del líquido disminuyeron 5,4% en el periodo de enero a noviembre 2012-2013, según el Centro de Tramites de las Exportaciones (Cetrex). Hasta noviembre pasado las ventas de leche sumaron $64.01 millones, frente a los $67.5 millones reportados en el 2012.
La entrada en vigencia del Acuerdo con la Unión Europea no significa una oportunidad para la industria lechera nicaragüense, que reconoce no estar preparada para ese desafío.
Y las dificultades en términos de competitividad se extienden a los demás países centroamericanos, donde la trazabilidad de los productos ganaderos no está implementada, tal como lo requieren las normas europeas.
A los efectos de optimizar la productividad del sector lácteo, el gobierno busca atraer inversiones de países de la región latinoamericana.
El presidente ejecutivo de la Agencia Oficial de Promoción de Inversiones (Pronicaragua), Álvaro Baltodano señaló que se mantienen conversaciones con una delegación de inversionistas de la Argentina sin dar mayores detalles.