La rentabilidad cae al aumentar la liquidez de los activos, pero liquidez es lo que asegura la vida del negocio bancario y el dinero de sus clientes.
Los bancos panameños no han hecho uso de los fondos extraordinarios que el Programa de Estímulo Financiero (PEF) puso a su disposición para estimular el otorgamiento de créditos. Además de considerar que ese dinero muy costoso, simplemente no lo han necesitado.