La inseguridad ha hecho crecer el número de empresas en el ramo, y ahora se enfocan no solo en el segmento de mayor poder adquisitivo, sino en un creciente nuevo mercado compuesto por comerciantes y gerentes de empresas.
Entre $12 mil y $40 mil oscila el costo de blindar un automóvil en El Salvador, donde la creciente inseguridad ha derivado en el surgimiento de un nuevo segmento del mercado, que se suma a las familias y grupos empresariales de mayor nivel socioeconómico del país, que siempre han recurrido al servicio de blindaje. Propietarios de comercios, gerentes de empresas, productores agrícolas y políticos optan ahora por proteger sus automóviles.
A los costos de producción que asumen los cañicultores salvadoreños durante la zafra se suman los gastos que deben realizar en seguridad privada y en apoyo a la policía para evitar robos y extorsiones.
Los cañicultores tienen destinado un presupuesto adicional para los costos de seguridad que deben asumir debido al aumento de las amenazas y extorsiones por parte de los delincuentes.
Los límites al número de oficiales contratados y otras condiciones legales obligan a las grandes empresas de seguridad a crear subsidiarias más pequeñas dedicadas a brindar servicios en zonas específicas.
En lo que va del año se registraron 145 nuevas empresas de seguridad ante el Ministerio de Seguridad Pública, casi el mismo número de nuevos negocios creados durante todo el 2013, cuando se registraron 150.
Entre 2003 y 2013 el número de empresas registradas para brindar servicios de vigilancia y seguridad privada se multiplicó por 13.
Un informe de la Contraloría General de la República detalla que al número de empresas que brindan servicios de seguridad se suman las personas físicas registradas como agentes, los cuales a la fecha suman 29.582 personas.
Ya suman 140 las empresas autorizadas por la Policía Nacional para brindar servicios de seguridad privada en el país.
Luis González, Presidente del Instituto Centroamericano de Seguridad Privada, ha señalado “que el desarrollo de esta industria está relacionado más con el crecimiento económico del país que con el aumento de la inseguridad.”
"Se tiene la percepción errónea de que la seguridad privada aumenta en la medida que hay mayor inseguridad, lo cual no es cierto. La seguridad privada aumenta con el crecimiento de la economía... Hay más desarrollo y el empresario busca como proteger sus activos (edificios, mercadería, propiedad intelectual, personal)”, afirmó Luis González.
El Gobierno buscará el apoyo de la empresa privada para crear un patronado antiextorsiones con el objetivo de iniciar una lucha frontal contra las personas que cometen ese delito.
“Nos vamos a reunir con ellos a fin de ver la posibilidad de conformar un patronato antiextorsiones. Estamos buscando no solo aporte económico, sino colaboración para que nos abran el camino y generen más confianza con los empresarios que son extorsionados a que denuncien”, explicó David Munguía, ministro de Justicia y Seguridad.
En El Salvador el presupuesto estatal destinado a Seguridad es de $500 millones anuales, mientras que en su conjunto la empresa privada invierte $600 para autoprotegerse.
“Los presupuestos sumados (Policía Nacional Civil, Fiscalía General de la República y Fuerza Armada de El Salvador) llegan alrededor de $500 millones y el sector privado invierte arriba de $600 millones anuales en el tema de seguridad”, dijo Jorge Daboub, presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP).
En los últimos tres años el porcentaje del presupuesto que las empresas deben destinar a seguridad aumentó de 8% a 12%, y comienzan a incluirse los gastos por extorsión.
Los datos surgen de la última Encuesta Empresarial realizada por la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes).
A los gastos en instalación de sistemas de seguridad y contratación de personal de seguridad privada ahora hay que sumarle los gastos por extorsión, señaló Andrés Castillo, presidente de la Cámara de Industrias.
En promedio, en América Latina cada agente de seguridad privada dispone de 10 veces más armas que en Europa.
Según The Small Arms Survey 2011: States of Security, generado por The Graduate Institute de Génova, la industria de la seguridad privada registra un desarrollo importante, llegando a contar en la actualidad con cerca de 20 millones de empleados declarados a nivel mundial, una cifra que dobla la de los efectivos policiales.
Mientras en el 2009 los comerciantes gastaron $174 millones en seguridad para sus empresas, en el 2010 ese gasto ascendió a $190 millones.
El estudio de la Cámara de Comercio de Costa Rica revela que el 42% de los empresarios encuestados señaló haber sido víctima de algún acto de violencia.
"... estamos convencidos de que el Gobierno no ha cumplido su parte...