Clientes que se guían por la inmediatez y la tecnología, quienes además están más enfocados en viajar que en comprar un seguro de salud o de vida, obliga a las aseguradoras a reinventar sus procesos para seguir aumentando sus ventas.
Martes 27 de Agosto de 2019
Debido a que el grupo de la población conocido como los "millennials", que está compuesto por clientes que les gusta marcar el ritmo en el proceso de compra y no están dispuestos a esperar, las empresas deben transformarse para seguir con su ritmo de ventas.
Ante estos desafíos, existen innovaciones tecnológicas como las denominadas InsurTech. Estas empresas de nuevas tecnologías, desarrollan para las aseguradoras "... plataformas y aplicaciones que comparan productos, analizan el perfil de los usuarios, crean accesos y simplifican trámites para el reclamo y pago de los siniestros, además de facilitar la suscripción en línea, significan un giro para las empresas del ramo", explica Martesfinanciero.com.
Juan Moreno, economista de la Superintendencia de Seguros de Panamá, dijo que "... 'Hay potencial para que la industria de seguros siga creciendo gracias a las nuevas tecnologías y otros factores importantes, tales como la tecnología financiera (InsurTech) que ayuda a mejorar las actividades financieras, seguros telemáticos, herramientas de comparación, herramientas para definir la compra, innovación sostenible, y responsabilidad con el medio ambiente'.”
Otro factor que ha transformado la industria son los nuevos modelos de trabajo que derivan de la economía colaborativa, pues se plantean discusiones entorno a quien debe cubrir los accidentes en estos espacios laborales.
Las restricciones a la movilidad decretadas en la región abren nuevas oportunidades para los puntos de venta como pequeños autoservicios, pulperías y tiendas de barrio, que pueden recurrir a esquemas de servicio de entrega a domicilio para potenciar sus ventas en este contexto.
En el actual contexto de crisis sanitaria las grandes cadenas de supermercados han implementado protocolos de seguridad e higiene, los cuales obligan a los consumidores a asumir largos tiempos de espera para hacer sus compras.
Explicado por el desempeño de los seguros de vehículos y de salud, durante el año pasado la primas pagadas en Panamá sumaron $1.562 millones, 6% más que en 2017.
Cifras preliminares de la Superintendencia de Seguros y Reaseguros detallan que el año pasado los ingresos por seguros para vehículos ascendieron a $321 millones y crecieron 9% respecto a 2017.
El crecimiento en las ventas de automóviles y viviendas en el país genera una oportunidad para el negocio asegurador, en un mercado donde la penetración es de apenas 3%.
El mayor poder adquisitivo y el consecuente incremento en las compras de casas, automóviles y otros bienes está generando interesantes oportunidades para otros negocios complementarios.
Las aseguradoras vendieron primas por un valor de $273,7 millones de dólares en el primer trimestre del año, en buena medida gracias a siniestros asociados a vehículos.
Un incremento en la cantidad de vehículos, el alza en los precios de las piezas y los trabajos de reordenamiento vial son factores de un número más elevado de siniestros, lo cual ha llevado a un aumento de las ventas de seguros.